Eslovenia exhibe con orgullo en su escudo y sus monedas el pico más alto y característico del país, situado en un parque nacional en mitad de los Alpes Julianos. Para llegar al Triglav, y dado el diminuto tamaño de este estado centroeuropeo, el visitante puede recorrer antes una serie de puntos muy recomendables que paso a describir:
–Las grutas kársticas cerca de Postojna: uno de los sistemas de cavernas más grandes de Europa y el primero del mundo en ser acondicionado al público. Si recordáis aquella película de Indiana Jones y el templo maldito, en el interior de estas cuevas podéis vivir una experiencia muy similar a la de la escena en la que Harrison Ford y sus amigos son perseguidos a través de un intrincado y arriesgadísimo circuito de raíles. La entrada es bastante cara -cerca de 20 euros por persona- pero solo ese paseo de 30 minutos en un veloz trenecito que os llevará a las profundidades de la Tierra, vale el desembolso.
–El Castillo de Predjama: casi todo el vientre de Europa y especialmente el oeste de la antigua Yugoslavia está constituido por terrenos porosos donde las cavernas, los ríos subterráneos y una accidentada orografía se combinan para crear paisajes de llamativa delicadeza e instantáneas tan fantásticas e insólitas como la que podréis contemplar en el acantilado de Predjama, de más de 120 m de altura, bajo el que hay otra cueva enorme con un castillo completo dentro, ¡sí, un castillo!
–El lago de Bled: otro entorno verdaderamente celestial al pie del P.N. del Triglav. Un lago limpísimo con una islita en su centro a la que se puede acceder mediante barquitos y en la que hay una coqueta ermita. En los alrededores de este valle podéis hacer excursiones al castillo o a otros puntos desde los cuales hay una vista magnífica.
–El lago de Bohinj: Muy próximo al anterior y de similares características. Después de otro paseo por esta maravilla natural, los valientes pueden intentar escalar el Triglav, cosa que todo buen esloveno tiene obligación de hacer una vez en su vida.
Si llegáis a Eslovenia por carretera, deteneos en Trieste (Plaza de la Unidad) y en la cala de Portoroz (imprescindible ir en verano).